El ozono desempeña un papel beneficioso o perjudicial para nuestra salud, de acuerdo con la capa de la atmósfera en que abunde.

El ozono en la estratósfera nos protege de los peligrosos rayos ultravioletas que llegan del sol y desempeña, por tanto, una importante función protectora.

En la tropósfera el ozono puede dañar el tejido pulmonar y es peligroso para las plantas, por tanto su efecto en esta región puede considerarse como malo.

Los clorofluorocarbonos, o CFC, son una familia de compuestos químicos que se emplean en la industria, como, por ejemplo, en la fabricación de chips para computadoras.  Un átomo de cloro que se libere de una molécula de CFC puede destruir unas 100 000 moléculas de ozono.

El proceso de destrucción de la capa de ozono se realiza de acuerdo con los siguientes pasos:

• La radiación Ultravioleta (UV) que proviene del Sol golpea una molécula de CFC.  Producto de esta interacción se separa un átomo de Cloro (Cl).
• El átomo de Cloro choca con la molécula de ozono que está formada por tres átomos de oxígeno y toma un átomo de este para formar monóxido de cloro.
• Cuando un átomo libre de oxígeno choca con el monóxido de cloro, se libera nuevamente el átomo de cloro que puede destruir más ozono.

La alteración del grado de radiación ultravioleta por la distorsión de los niveles de ozono, es un fenómeno actual que puede afectar notablemente la vida en la Tierra.